Ubicada sobre la Avenida 80, la Nueva Villa de Aburrá es un
complejo urbano que incluye una amplia zona comercial, un sector de
apartamentos para vivienda y oficinas, así como una plazoleta que sirve de
encuentro a jóvenes y familias del sector de Belén, en el Occidente de
Medellín.
En los terrenos donde hoy se encuentra construida la Nueva
Villa de Aburra, existían dos fincas ganaderas con muchos árboles frutales y
grandes extensiones de terreno utilizados para que el ganado pastara en ellos.
El barrio se empezó a construir a partir de 1981 cuando se
inicia la primera etapa, las etapas 2 y 3, fueron construidas en 1983,
considerando un barrio nuevo por sus características dentro del desarrollo de
la ciudad 25 años atrás.
El barrio fue construido con su naturaleza de urbanización y
con diseño especial para la época, por esta condición sus carreras y calles, se
encuentran interrumpidas por plazoletas interiores.
Geográficamente limitaba con la fábrica Vicuña que en la
actualidad es el Centro Comercial Los Molinos, por el occidente con el barrio
Belén Las Mercedes, Urbanización las Canarias de la Castellana, por el norte
con el barrio la Castellana y por el oriente con el barrio Miravalle, además de
ser bordeado por la quebrada la Picacha.
Su estrato socioeconómico es 5, aplicado a un grupo
multifamiliar compuesto por 68 edificios cada uno con 8 apartamentos para un
total de 544 y aproximadamente 2000 residentes, clase media en su mayoría
pensionados.
En su área verde el maestro Justo Arosemena Lacayo creó y construyo en
1985 el “Monumento al Obrero” obra que hace tributo a los obreros de la
construcción.
Su equipamiento cuenta con un centro cultural, campo
deportivo y de recreación, una suficiente zona arbórea y un centro comercial o
plazoleta.
La plazoleta de la urbanización fue creada como un área de
comercio enfocada a satisfacer las necesidades de consumo de los habitantes del
sector; su arquitectura se asocia como un No-lugar : una amplia explanada
ausente de espacios en dónde reposar, estructura que refleja una finalidad de
transición y poca permanencia.
